Libelula: Nunca una reflexión tan acertada. Uno planta Orquidea y termina cosechando Geranio. Y bueno a toda relación hay que regarla como a las plantas si queremos que cresca generosa y poderosa. A veces no sale como queremos pero por lo menos hicimos el intento. La estafa en las relaciones es un alimento del día a día, por eso mucho ojo atento para evitar que la caía sea extrepitosa. Y finalmente: El hilo siempre se corta por el lado más fino.
Un beso,
Maya
At 01 agosto, 2007 02:37, Stephy
si y muy recontracierto...de hecho hay veces en que el corazon nos pone un poco ciegos y tantos sueños y deseos juntos a la vez empiezan a elevarnos en la felicidad mas inmensa que nadie pueda imaginar en ese momento... pero cuando nos ciega de mala forma es que nos pegamos esos aterrizajes de los alunisajes, que apesar que muchas veces son dificil de comprender luego en nuestro camino poquito a poquito se puede entender el resto de la historia y el dolor se hace nada... y mas aun cuando el sol vuelve a nacer y brillar y vuelves otra vez a despegar por otro gran sentir... te das cuenta que lo anterior no fue mas que para poder darte cuenta de cuan grande es este nuevo amor y latir del corazon.
un besote
bye
At 01 agosto, 2007 06:25, MariJose
En el día a día, tenemos una desilusión tras otra... muchas veces nos sentimos defraudados, confusos, queremos tirar la toalla... Ojalá esas desilusiones nos hicieran aprender de los errores, intentar corregir aquello en lo que fallamos... Pero cuando el resultado de aquello que esperas no depende de ti... todo cambia, lo único que podemos hacer es aprender a llevar lo mejor posible esa desilusión...
1besito!
At 01 agosto, 2007 14:30, Sentir Miedo
rdosPerecedero a las letras.
Uf! yo también sé que es vivir en torno a un cultivo, era de los que dejaba de hacer mis propias cxosas por hacer que esa plantita creciera, me esforcé tanto, le puse tanto cariño, que a veces llego a pensar que eso fué lo que la mató, pero finalmente caigo en cuanta de que esa semilla era la que estaba mala, creció con las raices demasiado torcidas que hicieron que se matara a si misma,ella no quería ser regada solo por mi, quería que todo el mundo lo hciera, eso me mató a mi, mas aún cuando por fin dió un fruto y ese fruto venía envenedado.
¿Pero sabes que es lo mejor de estas plantas de semillas muertas? es que tienes una nueva chance de cultivar otra, pero esta vez cuidando solo lo que se debe cuidar, dejandole espacio a que lo espontaneo ocurra,no desvelarse mas si alguna noche llueve mas fuerte, es mejor dejar que la naturaleza haga lo suyo,y lo mejor es que podemos elegir otra vez que tipo de planta queremos y comprar las mejores semillas que podamos encontrar.
At 01 agosto, 2007 19:36, Ricardo J. Román
Creo que lo más importante de todo es que para que exista una cosa, debe existir su oposición. Si existe la alegría, debería existir la decepción, como para equiparar los momentos. Un mundo 100% feliz, sería vivir en casa de los Flanders (The Simpsons) y me niego a hacerlo como Bart jejeje
Besitos, preciosa!
At 01 agosto, 2007 21:58, Mikamy
Cuando siembras papas, no esperas cosechar cebollas. Pero por desgracia, en las relaciones dos más dos no siempre es cuatro, y no siempre cosechas lo que siembras. Pero cuando una planta muere, siempre puede nacer otra, solo hay que volver a abonar la tierra. El milagro de la vida es sorprendente, y puede mucho más que el de la muerte.
¡Un abrazo!
At 01 agosto, 2007 23:52, Paula♥
Lo importante es sembrar bien, para que al momento de la cosecha no nos asombremos de los frutos que obtenemos.
Hay cosas que no manejamos, como por ejemplo el clima, pero lo 'bueno' es que cada vez aprendemos cómo es que hay que hacerlo...
En mi caso ha sido así, hay relaciones que han muerto por uno que otro motivo, ya sea por ese clima, o por culpa mia, porque no regue suficientemente la planta, o pórque no le preste la atención suficiente al jardín.
Cuando queramos cultivar algo tiene que ser algo mutuo, porque como pusiste tú hay veces en que nos esmeramos mucho pero el resultado no es lo que esperábamos y simplemente nos desilusionamos.
Un besooo libelula, saludos! :)
At 02 agosto, 2007 00:39, Benjo
creo interpretar el mensaje central... desepcion... realidad cruda y hasta a veces, hostil.
El regar, el plantar, se tiene que hacer por el gusto de hacerlo, pero si siempre se esperara un fruto, entonces viviriamos en un mundo de espectativas, de reciprocidad, de dar y devolver... dar desinteresadamente, cultivar por vocacion, eso por si mismo es cosecha y fruto a la vez... va tanto en las metas como el esfuerzo que uno ponga en las personas... muchas ni se dan cuenta el esfuerzo que uno hac epor ellos, pero otras pocas si lo hacen, y eso es suficiente... no por conformismo, sino que la cantidad, no va con la calidad
saludos
BeNjO
At 04 agosto, 2007 23:33, yonomás
Tienes razón con la metáfora. Uno puede poner todo su esfuerzo, día tras día, año tras año, sembrando, alimentado cuidadosamente, y de ahi, no sabe como ni te diste cuenta y cuac! cosechaste OTRA COSA!
Uyy.. como es díficil empezar a sembrar otra vez frente a inmensa decepción. No, eso nadie nos lo enseño en el colegio.
saludos :o)
At 17 agosto, 2007 02:52, karol
porsupuesto una plantita es tan fragil como el amor de pareja, se debe cuidar mucho y alimentarla cada dia. Suena tormentoso pensar en cosechar algo tan distinto a lo que hemos sembrado ( mutaciones en la semilla etc), me refiero a cosas que pasan dentro de una relacion y que a veces no nos percatamos porque andamos preocupados de otras cosas.y le echamos la culpa a la vida...error es solo descuido nuestro.
"una vez me dijeron cuando anhelas algo con toda tu fuerza lo logras obtener, porque la energia se invierte""
preocupemosnos de lo que tenemos al lado, para evitar lamentaciones...
saludos
mmm...veo ke muchas entradas son viejas pero ojala aun veas tu blog....
llegue solo de casualidad,vi lo que asumo será tu foto, lei algo de lo mucho ke esta escrito...
pero por muy psico que suene, me encantó -todo- loke hai aki...
ojala nos podamos poner en contacto, me llamo Pablo Irigoyen y soi de conce
chau