sábado, diciembre 23, 2006
Posteado por Libelula a las 2:33 a. m.

asdasdasda 
 
Posteado por Libelula a las 2:18 a. m.



Es cierto que muchas personas aman la navidad. Es más cierto aún que tantas otras la odian.
Entre ellos el Grinch. Este personaje la odiaba por una simple razón, tenía el corazón tan pequeño, que no soportaba ver a otros felices.
Yo, entre los dos grupos de personas, creo que me ubico al medio. No la amo, tampoco la odio, y al contrario del Grinch, no soporto ver que algunos sean tan infelices para estas fiestas.

Pero como no en la vida todo es dulce, les deseo feliz navidad a todas las personas que siempre de tan buena gana se dan una vuelta por acá leyendo mis locuras.
Feliz navidad, con el verdadero significado de esta.
 
miércoles, diciembre 13, 2006
Posteado por Libelula a las 3:19 a. m.


Existe una diferencia entre el valor y el precio.
El valor es, valga la redundancia, lo que vale, y el precio es cuanto estamos dispuestos a pagar por algo.
Y entre estos dos conceptos, muy poca gente conoce la diferencia.
El valor que se le da al respeto es poco, y el precio que hay que pagar por ello es elevado.
En estos últimos días, ante la muerte de A. Pinochet, han salido a debate las cosas que debiesen, pero no de la manera indicada.
Tanto gente de izquierda, como de derecha, sale a defender sus ideales atropellando la opinión del resto.
Al final, parece ser una carrera de quien levanta más la voz para dejarse escuchar, y no de una conversación basada en fundamentos que realmente importen, y no sonar como una grabadora que repite más de lo que piensa.
Muchas veces, nos quedamos con lo que escuchamos en casa, con los amigos, o para algunos más llevados por su pasión, en el partido político.
Malo no es, pero la crítica que hago yo... es algo elemental.
Si tenemos dos oídos y una boca.. no será que tenemos que escuchar el doble de lo que decimos?
Nuestra opinión se nutre si podemos conversar y argumentar con una persona que piensa distinto a nosotros, y mejor aún, se enriquece nuestra mente con tan buena actividad.
Mi invitación es entonces, no a dejar de discutir, sino que al contrario, discutir pero escuchando, respetando y comprendiendo los argumentos que se nos presentan, tomando aquello que nos pueda servir, aprendiendo de las cosas que desconocemos, para así, cuando demos una opinión, saber de lo que estamos hablando.
Cuando no se algo, mientras más callo, más aprendo.. ya que dejo que los que puedan saber, me entreguen su conocimiento.
Blanco o negro, izquierda o derecha, verdad o mentira... Tal vez nunca podremos hacer que estas dos caras de la moneda sean una, pero sin duda alguna, mientras más interactúen, más llenas de conocimientos estarán.
Incluso Newton, quién creía que la ley de gravedad era universal, se equivocó.
No podemos creernos dueños de la verdad absoluta.
Por que la verdad depende de donde se mire. Y de donde se aprenda.
El valor de los demás radica en la diferencia.
Y el respeto que le tenemos a esta.
Y como, a pesar de lo distintos que somos, somos capaces de convivir con ello.

 
lunes, diciembre 11, 2006
Posteado por Libelula a las 3:21 a. m.



A penas supe que venía Coldplay me puse a investigar quien, donde y cuando se venderían las entradas.
Las ganas de ver a Chris Martin cantando con su dulce voz son muchas, pero no se que pensarán las personas que lo traen cuando piensan en los precios (que en Ticketmaster van desde los $40.000 más gastos e impuestos varios).
A sí que tendré que conformarme con bajar las canciones luego de las presentaciones... o "respaldarlas" en mi computador.
Está claro que son un grupo excelente, incluso si pensamos en la calidad de ellos tal vez se justifica el precio, pero un poco más allá, me pregunto porqué Chile es uno de los países en Sudamérica más caros para este tipo de eventos.
Desde el recital de U2, pasando por Pearl Jam e inclusive Shakira y unos tantos más.. qué tenemos nosotros?
Será la cara de (biiiiiip) por la cual las entradas son mucho más caras que en EEUU inclusive?
Me pregunto mil veces y quisiera saber a quien más preguntarles porqué en Chile se castiga tanto las actividades "Culturales".
Desde el maldito impuesto al libro (y así quieren niños más inteligentes) hasta los recitales de "calidad".
A quién se le ocurrió la brillante idea de cobrar por todo lo bueno?