lunes, diciembre 05, 2011
Posteado por Libelula a las 9:34 p. m.

La vida es demasiado corta.
Pende de un hilo.

Basta un mal movimiento, para acabar herido, muerto o peor aún, no darse cuenta de que hemos sido dañados.
Cada día nos levantamos pensando en lo que haremos "mañana", sin considerar bien que estamos pisando "hoy".
La vida es demasiado corta para pelearse con quien queremos, para pasar un día sin decir "Te quiero" y muy... pero muy corta cuando comenzamos a vivir nuestros sueños.

Y a veces muy larga. Cuando vamos en el camino a conseguir lo que creemos.