Sobre la foto: Nadie recuerda quienes iban en los tanques, pero todos recordamos que alguien tuvo el valor de pararse frente a ellos y defender lo que quería.
Si el problema no tiene solución, ¿para qué preocuparse?
Algunas veces me pregunto que pasa por la mente de las personas cuando enfrentan un problema.
En algunas frustración, en algunas rabia o impotencia, otras simplemente, se resignan.
Pero que hacer cuando es un problema en conjunto? Es mejor ser parte de la solución o es mejor esperar pacientemente a que otros lo solucionen y despues tomar crédito de ello?
Pasó hace algunos días, algo así.
Había un problema que solucionar en conjunto, y como siempre, alguién que tiene que tomar el control. La persona va, y cuando viene alguien a pedir explicaciones, los demás se hacen los desentendidos, o peor aún, no prestan ni ayuda ni se hacen parte. Se "desligan", que es lo más fácil.
¿Es que acaso estamos acostumbrado que los demás hagan cosas por nosotros y luego hacernos los desentendidos?
Es tan fácil atacar en masa, pero cuando no es justo.. qué hacer?
1.-Callar: ..y con eso.. dejamos la impresion que nuestro ataque es pasivo. Al callar, estamos siendo unos cobardes que dan su silencio a favor de la manada que ataca.
2.-Hablar: ..dar a conocer tu punto de vista sin tomar partidos.. a veces prestar el servicio de "moderador" arbitrariamente.
3.-Comprometerse: Pelear por lo que es justo, o mejor aún, lo que es correcto.
¿Porqué a las personas les cuesta tanto elegir entre estas últimas dos opciones? ¿Es que ya nadie se atreve a "mojarse el potito" por el resto? Entonces que podemos actitudes podemos esperar de los otros con nosotros?
Vamos, está más que claro que lo que uno da es lo que recibe (y aunque no siempre esta relación de reciprocidad se dá, pero siempre es lindo pensar que sí) es conveniente siempre dar el máximo. Por los otros y por nosotros mismos.
Por lo menos, el gasto es el mismo entre hacer las cosas "a medias" y hacerlo bien. Sólo que la diferencia la notamos nosotros. Entre hacerlo a medias, nuestra conciencia siempre nos recordará que teniendo la posibilidad de haberlo hecho bien, lo hicimos mal. Un recordatorio de por vida.
¿Qué es lo malo entonces?
La falta de compromiso de algunas personas. Eso de "sacarle el poto a la jeringa" que tanto los caracteriza. Y luego, culpar a la jeringa.
No deberíamos ver las cosas desde otra perspectiva, ver cual es nuestro compromiso y que es lo que realmente estamos haciendo por cumplirlo?
En esos pasos estoy yo en este momento.
Peleo por las cosas que son justas, y mil veces más por las que no.
Siempre cuesta más defenderse de mil personas a ser la persona número uno que ataca.
Y lo que todos recuerdan al final, son aquellos a los que se detuvieron en su paso para luchar, no aquellos que atacaron en cobardemente en manada.
Y yo, como un "Robin Hood" urbano, defiendo las causas justas, dando la voz y la cara por ellas.
Ganando amigos y enemigos en el camino, pero en mi interior, sé que estoy dando lo máximo.
Tendría sentido la vida si no la vivimos para comprometernos, arriesgarnos y luchar por lo que queremos?